Supongo que por deformación profesional (marketing), yo
pienso que cuando uno decide hacer algo que sea notorio, siempre tiene que
pensar en alcanzar a su público y ganárselo.
¿Cuántas huelgas conocéis que no terminen castigando a quien
no debe y perdiendo el apoyo popular? Recordemos sin más los empleados del
transporte público, cuando se ponen en huelga, por mucha razón que tengan
terminamos todos criticándoles, en vez de apoyarles en su causa para
que terminen con sus reivindicaciones. No habré escuchado yo veces a alguien
decir… “si lo que tendrían que hacer es trabajar y no cobrar a nadie, para
hacer daño a quien tienen que hacerlo!"
Seamos listos. Entre las muchas opciones que he leído y
oído, hay una que me gusta MUCHO. Y seguro que poco a poco se nos ocurren más
ideas del mismo calado. Y es la huelga BUROCRÁTICA. Tiene la ventaja de que no
afecta a nuestros alumnos, ¡ni a sus padres! (porque reconozcamos que los
alumnos, si hacemos huelga, estarán la mar de contentos, y ese no es
nuestro objetivo)
Yo a quien quiero demostrarle mi indignación es a la
administración… pues seguro que tenemos muchas maneras de hacerlo similares a ésta.
Si voy a trabajar y no le envío ni una programación, ni un
documento, a mis alumnos no les perjudico (no quiero) y a ellos sí, porque pierden
el control.
Seamos ingeniosos, no nos pongamos a la opinión pública en
contra, ¡pongámosla a nuestro favor!... y ¡¡seremos más!!
Ánimos... tenemos que conseguir frenar todos esto. Media España ya está sufriendo las consecuecias de estos políticos.
ResponderEliminarhttp://unpaseomanchego.blogspot.com/2011/09/no-son-dos-horas-mas-es-la-ensenanza.html
Saludos.
Laura, tengo una opinión bastante similar a la tuya. Hay formas de mostrar el malestar, de defender lo mejor para nuestros alumnos y sus familias y tenemos cauces para que nuestra voz se escuche. Utilicémosla.
ResponderEliminarUn saludo.